4.3.09

Bocazas presidenciales

Que la mayoría de los presidentes de equipos de fútbol son semianalfabetos es algo que creo que sabe todo el mundo que está al tanto de lo que se cuece en el balompié (esto es, que de vez en cuando abre un periódico deportivo). Su cuasi-analfabetismo es más de tipo funcional, es decir, seguramente saben leer, escribir, construir frases sencillas y, sobre todo, contar, pero a la hora de poner esas cosas en práctica los pobres se lían.

Se lían, a veces, con lo de contar y, claro, algún milloncejo se escapa a la caja que no era. Pero sobre todo se lían al hablar, al abrir la boca y dejar salir algo que no haga sonrojar a los seguidores de su equipo o descojonarse a los rivales.

Véase por ejemplo a Boluda, ese señor de divertido apellido que, sin saber muy bien cómo ni por qué, ahora es presidente del Real Madrid. El hombre, que no la vio más gorda en su vida, se encontró de repente con una eliminatoria de Champions contra el Liverpool y dijo que los iban a chorrear. Luego lo arregló y dijo que, en realidad, lo que quería decir es que el Madrid les iba a pasar por encima o algo así. Todo muy juju-jaja, como acostumbran a hablar los que se han hecho ricos a base de herencia familiar. Luego llegó el partido y zas, 0-1 para el Liverpool y a ver si tienen huevos de remontar en Anfield.

Claro que Boluda aún puede tener una suerte como la catedral de Burgos y que el Madrid haga la machada, no como Del Nido. Al presidente del Sevilla se le ocurrió decir justo antes de la vuelta de semifinales de Copa ante el Athletic que se iban a comer a los leones empezando por la melena y terminando por el rabo. En el minuto dos el Sevilla ya perdía 1-0 y al descanso 3-0 y chorreo (estos sí) del público de San Mamés: "cómeme el rabo, Del Nido cómeme el rabo".

Y es que ya sabe. Es mejor estar callado y parecer idiota que abrir la boca y disipar todas las dudas.

2 comentarios:

Haters dijo...

"Se lían, a veces, con lo de contar y, claro, algún milloncejo se escapa a la caja que no era."

JAJA

El Impenitente dijo...

No te metas con Boluda que es el dueño de medio puerto de Valencia y de no sé cuántas cosas más.

Ahora, de lo que el sabe es de ganar dinero y de trabajar. En cuanto se ve en un cargo notorio y con micrófonos delante, esta gente, que se supone que es hábil, se convierten en perfectos bobos. Es curioso, sí señor. Lo poco que cuesta ser discreto. Y lo difícil que es.