30.6.08

Que viva Torres y la madre que lo parió

Me la envaino las veces que haga falta, y con gusto. Desde ahora mismo reseteo mi relación con Fernando Torres, el futbolista que nos ha dado el gustazo de ganarle una Eurocopa a Alemania. Bueno, él y los otros trece que se dedicaron a bailar a los germanos desde el minuto quince, justo cuando dejaron de temblarnos las piernas.

Llevo horas con una sonrisa en la cara y dudo que se me quite al menos hasta dentro de quince días. La de complejos que nos hemos quitado de encima en noventa minutos. Esto sí que es terapia de grupo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Buenas y santas,

bienvenido al grupo de los convertidos, de los que pensábamos que Torres era un producto inflado, pero que nos lo tragamos con mucho gusto.

Viva Torres y la madre que lo pario.

Un saludo

Leon dijo...

Esto va a llevar tiempo digerirlo, la falta de costumbre (y de fe de muchos entre los que me incluyo) es lo que tiene.
Título merecidísimo, ganado a pulso. Enhorabuena chicos!

El Impenitente dijo...

¿Quince días? A mí aún no se me ha caído la sonrisa del doblete, así que con esta sonrisilla que tengo ahora me amortajarán dentro de mil años, por supuesto.

Viva Torres. Vivan todos. Hemos ganado y cómo hemos ganado. Fabuloso. Tremendo. Inolvidable.