26.1.06

Odio el PowerPoint

Si hay un programa informático que odio de verdad, ese es el PowerPoint y similares (Impress de OpenOffice.org, por ejemplo). Creado en principio para hacer presentaciones de proyectos de una forma fácil, poco a poco trascendió hasta convertirse en una herramienta para colapsar el correo electrónico que ríete tú del spam más aguerrido.

Cada día llegan a mi buzón al menos un par de archivos .pps que podemos dividir en tres grandes grupos: chistes, cadenas y pornografía. En el primer caso, no sólo son chistes más viejos que la orilla del río sino que encima no tienen ninguna necesidad de apoyarse en el formato PowerPoint porque son exclusivamente texto; a lo sumo, incluyen alguna horrible imagen de fondo sin relación alguna con el chiste. El texto en sí varía entre párrafos apareciendo y desapareciendo de la pantalla con cada clic y tediosas animaciones con letras lloviendo o apareciendo una a una que te obligan a estar dos minutos esperando para leer cuatro palabras. En resumen: el chiste de toda la vida rodeado de imágenes y efectos propios de un decorador de culebrones venezolanos.

En el caso de las cadenas, más de lo mismo, aunque las imágenes sí tienen que ver con el tema tratado (niños del tercer mundo rodeados de moscas, personas con malformaciones, montajes irrisorios...). Es decir, a la irritación que ya de por sí produce leer el clásico "envía esto a doscientas mil personas antes de media hora o cuatrocientos millones de somalís morirán por tu culpa" hay que añadir que la frase tarda como media hora en salir porque va letra por letra, con el ruido machacón de una máquina de escribir antigua acompañando a cada carácter.

Por último, el porno parece el contenido que mejor se adapta al programa en cuestión, ya que se limita a pasar foto tras foto toda una colección de señoritas exhibiendo carne, pero (porque siempre hay un pero) la tentación es mucha y los creadores no se resisten a poner algún tipo de comentario entre foto y foto, por supuesto con letras apareciendo aleatoriamente o alguna horterada similar.

Eso sí, cada vez que se me ocurre pedirle a la gente que me manda esto que dejen de hacerlo, me responden que soy un agonías y un soso, respuesta que llega acompañada de otros tres o cuatro correos con sus correspondientes archivos .pps.

2 comentarios:

Albert Pou dijo...

tienes muxa razon cn todo lo k dices... yo tb pienso lo mismo... aunk ni me atrevo a decirles k n me envien mas d esos orribles i penosos pps., sobretodo d los pornografikos... xo bueno... parece k va acia menos :D... te invito a pasarte x mi blog i comentarme algo si kieres ;)

Corso dijo...

Me sucedía mientras tuve amigos "windowseros",je.
Solución rapida 1:cierra para siempre msn.
Solución 2:marcar los mails con adjuntos como spam.
Solución rapida 3:pasate ar linu.

Muy bueno el blog,saludos ;)