A falta de una hora para que comience la última carrera del Mundial de F1 en Brasil y después de haber escuchado y leído todas las previas salvo la de Tele5, que me niego a escuchar, quiero mostrar todo mi apoyo a Kimi Raikkonen en su intento por proclamarse campeón del mundo. En efecto, soy de esos que no quieren que gane Alonso, aunque al contrario que la mayoría, a mí el chaval no me cae especialmente mal y cuando empezó la temporada sentía la misma indiferencia que en todas las anteriores desde la retirada de Prost (vale, reconozco que cuando estaba Schumacher usaba a Alonso para picar a cierto shumi-ferrarista, pero sólo eso).
Mi deseo de que sea un finlandés en vez de un español el que gane viene más provocado por la prensa que por el piloto, ya que entiendo que un tipo que se juega la vida cada quince días piense más en cómo evitar pegarse un piñazo a 300 km/h que en hacer amigos. Sin embargo, todo lo que ha rodeado a Alonso este año huele que apesta a victimismo barato y a tabloide británico de medio pelo. Si hacemos caso a Lobato, al As, al Marca y a otros similares, Hamilton está donde está porque, sucesivamente, ha copiado los reglajes de Alonso, el equipo le ha beneficiado en las clasificaciones, la FIA no le sanciona y McLaren sabotea a sus propios pilotos. Todo esto añadido al clásico que nos acompaña desde hace tres años: cuando Alonso no gana es por un fallo de su coche o de sus mecánicos. Él no comete errores, por lo visto. O sí, y quizá el peor de todos haya sido dejarse llevar por esa prensa llorona cuando pierde y sensacionalista cuando gana.
Sea como sea, hago valer el pronóstico que se me vino a la cabeza al terminar el anterior Gran Premio: los dos McLaren se la pegan en la primera curva intentando adelantarse y Kimi gana echándose la siesta, como en Australia.
¿Que por qué no quiero que gane Hamilton? Es que ése sí me cae mal (aunque no tanto como a otros...)
7 comentarios:
Dicho y hecho. Me alegro, justo campeón.
Oeeeeeee!!!Kimi, el más grande, el peazo sorbo que le pegó a la botella de champán (champagne) nada más subir al podio, pasó el mundial casi de puntillas y ahí está (como dijo Elo). Dios, me he emocionado.
Como dijo José Luis Garci, "Sometimes, dreams come true".
No tienes precio como vidente.
Y, la verdad, ha sido un buen fin de semana: el Atleti arrasando, Sudafrica zurrándole a los ingleses, Hamilton, su padre y Dennis metidos debajo de la cama, Alonso sin mundial, Madrid y Barça jodidos. No ha estado mal.
Si tuviera el mismo tino para hacer la porra de fútbol cada semana me retiraba el mes que viene.
Por cierto, un placer ver a Vicisitud y Sordidez por aquí (blog totalmente recomendable, aunque por causas de vagancia mayor aún no figure en la columna de blogs).
Creo que más que tino, era una opción válida deseada por muchos de los que estábamos hartos de oir el jaleo de McLaren y sus dos niños mimados y egocéntricos.... jeje.
Les está bien empleado. Estas cosas me hacen creer en ese extraño concepto de la "justicia poética".
Saludos.
Hola Mocadele.
Está claro que en España ha habido más gente contenta con el campeonato de Kimi que con una hipotética victoria de Alonso.
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