Allá en el siglo XI, cuando el pueblo llano (y casi toda la nobleza) eran ignorantes analfabetos que apenas se preocupaban por algo más que tener algo que llevarse a la boca y procrear como conejos, lo de coaccionar con cosas como "arderás en el infierno" o "las palmas de las manos se te llenarán de pelos" era cosa fácil y muy recurrida por la "santa" Iglesia para controlar a su rebaño.
Pretender hacerlo hoy es, como poco, ridículo, aunque algunos todavía no se han enterado.
Por supuesto, partiendo de semejante base es totalmente innecesario pararse a reflexionar por qué la Iglesia Católica está en contra de una asignatura que, según ellos, "impone una determinada formación moral", cuando es lo que llevan haciendo desde hace siglos. En sus declaraciones, como en sus dogmas, no hay sitio para la razón.
3 comentarios:
Buenas y santas,
a mi me da que estos ven peligrar el monopolio ideológico.
Un saludo
Pues sí que vivían bien en el siglo XI, comiendo y follando como monos.
Rebatir a la Iglesia en bien fácil. Su comportamiento a lo largo de la historia está lleno de argumentos en su contra.
No se enteran, cada día se enteran menos. A la LIBERTAD con mayúsculas se llega por la Educación. Y en el siglo XI no tenían de eso. Pero ahora sí. Y así les luce el pelo, cada día más solos, más aislados, más trasnochados.
Ellos solos se apartan de la sociedad. Y los que les siguen son cada vez menos.
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