Están los vendedores de tabaco que trinan con las últimas bajadas de precios porque se encuentran con existencias en los estancos y bares que han pagado a un precio mayor que el establecido para la venta al público. Normal que se quejen, claro, aunque no oí a ninguno protestar durante los largos años de subidas constantes, que vendían con un margen mucho mayor que el esperado al comprarlo al proveedor.
La peregrina razón que dio una enfadadísima estanquera madrileña esta tarde en La Ventana (Cadena SER), es que el dinero extra que ganan con las subidas lo gastan luego al reponer existencias. Y se quedó tan ancha. Digo yo que cuando repongan las existencias del tabaco que ha bajado de precio también les saldrá más barato, equilibrando así la balanza. En cualquier caso, habría que dar la bienvenida a estos señores al sistema capitalista, al que parece que acaban de llegar.
Así que ya lo saben los fumadores: si suben los precios, todos a joderse, pero si los bajan ahí estarán los estanqueros para protestar, que ellos no pueden salir perdiendo. País.
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