Al menos eso es lo que parece echándole un vistazo a la prensa deportiva después del 5-1 a Eslovaquia el sábado. Ya antes del partido se pudieron leer perlas como que "jugar la repesca no es tan malo" (Marca) porque equipos como Alemania la jugaron antes y luego hicieron grandes mundiales. Curiosamente el artículo pasaba por alto las Eurocopas y ni siquiera mencionaba el "gran papel" de los nuestros en la última después de jugar la repesca.
También pudimos oir comentarios (Carrusel Deportivo) mientras empatábamos en Lituania, Bosnia o Serbia diciendo que no era tan raro y que el resto de selecciones llamadas grandes (Francia, Italia o Inglaterra) también lo estaban pasando mal para clasificarse. Tan mal que las tres fueron primeras de grupo.
Pero después del encuentro del Calderón la cosa se ha disparado porque le hemos metido 5 a Eslovaquia (potencia mundial del fútbol, como todo el mundo sabe), olvidando rápidamente que no sólo no hemos sido capaces de ser primeros en un grupo de risa sino que a punto estuvimos de no ser ni segundos. Eso sí, en un derroche de eso que llaman "furia", nos hemos (casi) clasificado por la puerta (de atrás) grande y ya vamos al Mundial de Alemania a comernos a cualquiera que se nos ponga por delante.
Y es que cuando nos ponen entre la espada y la pared, demostramos de lo que somos capaces (salvo si empuñando la espada está Francia, Italia, Brasil... ¿Corea?).
P.D.: Aquí lo dejo escrito. Lo primero que dirán los medios cuando se haga el sorteo del Mundial será algo así como "el grupo lo pasamos fácil, pero igual es mejor ser segundos para librarnos de Brasil(*) en cuartos".
(*) Donde dice Brasil, puede sustituirse por Italia, Francia, Alemania o Argentina.
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